Todos hemos pasado por momentos en los que la vida parece demasiado. Esos días en los que todo se complica, el estrés se apodera de nosotros y simplemente mantener la calma parece una misión imposible. Lo sé porque yo también he estado ahí, más veces de las que me gustaría admitir.
Por eso, quiero compartir contigo algunos trucos que me han ayudado a mantener la calma en esos momentos complicados. No soy ningún gurú de la paz interior, pero estas pequeñas cosas me han hecho la vida un poco más fácil, ¡y espero que te ayuden también!
1. Respira… pero de verdad
Seguro que has oído eso de «respira hondo», y suena a cliché, pero funciona. En esos momentos en los que siento que voy a explotar, detenerme a respirar de forma consciente me ayuda a centrarme.
Lo que hago es muy sencillo:
- Inhalo profundamente contando hasta 4.
- Retengo el aire mientras cuento hasta 4.
- Exhalo despacio mientras cuento hasta 6.
Hago esto un par de veces y, aunque no desaparezcan los problemas, siento que tengo más control sobre mi mente y mi cuerpo.
Inténtalo, no pierdes nada.
2. Haz una pausa (aunque sea pequeña)
Cuando la vida va a mil por hora, parar un momento puede parecer imposible. Pero, en realidad, tomarte aunque sea cinco minutos para desconectar puede hacer maravillas.
Yo suelo salir a dar un paseo corto, escuchar mi canción favorita o simplemente cerrar los ojos y dejar de mirar la pantalla por un rato. Es increíble cómo esos pequeños momentos pueden ayudarte a «reiniciar».
3. Habla contigo mismo (pero con amabilidad)
Lo admito, a veces soy mi peor crítico. Cuando algo va mal, mi mente se llena de pensamientos como «no puedo con esto» o «todo va a salir mal». Y ahí es donde intento cambiar el diálogo interno.
En lugar de decirme cosas negativas, me recuerdo frases como:
- «Esto también pasará.»
- «Estoy haciendo lo mejor que puedo.»
- «Un paso a la vez.»
No se trata de ignorar los problemas, sino de no machacarte más de lo necesario. Hablarte con amabilidad es un acto de autocuidado que, créeme, marca la diferencia.
4. Cosas que deberías evitar
Así como hay cosas que puedes hacer para mantener la calma, también hay cosas que es mejor evitar. Aquí te dejo un par de errores que yo solía cometer (y que trato de no repetir):
- Evitar la sobrecarga de información: En momentos difíciles, consultar constantemente las noticias o buscar soluciones en internet puede ser agotador. Aprende a desconectar.
- No te aísles completamente: Aunque está bien tomarte un momento a solas, hablar con alguien de confianza puede ser de gran ayuda. A veces, solo necesitamos que alguien nos escuche.
- Evita tomar decisiones apresuradas: Cuando estamos alterados, es fácil reaccionar sin pensar. Si puedes, date tiempo antes de actuar.
5. Haz algo que te calme
Cada persona tiene su forma de desconectar. A mí, por ejemplo, me ayuda mucho escribir. Poner mis pensamientos en papel me hace sentir que organizo el caos en mi cabeza.
Otros días, prefiero salir a caminar, escuchar música relajante o practicar yoga.
Busca lo que a ti te funcione. Quizás pintar, cocinar algo rico, o incluso simplemente tumbarte en el sofá y respirar profundamente. Lo importante es encontrar tu «lugar seguro», algo que te devuelva la tranquilidad.
6. Prueba el CBD para relajarte
Te voy a ser honesto: no conocía el CBD hasta hace poco, pero desde que lo incorporé en mi rutina, he notado una gran diferencia en cómo manejo el estrés.
Si no sabes qué es, el CBD (cannabidiol) es un compuesto natural que se extrae del cáñamo, y ayuda a calmar la mente y relajar el cuerpo sin efectos psicoactivos.
Yo suelo usar el aceite de CBD en días especialmente difíciles. Me gusta porque es fácil de tomar, y noto cómo mi mente se calma poco a poco.
Si prefieres algo más específico, las infusiones con CBD son geniales para relajarte al final del día, y si el estrés se siente en tu cuerpo, las cremas con CBD pueden aliviar la tensión muscular.
¿Por qué lo recomiendo?
- Es una forma natural de lidiar con el estrés.
- No causa dependencia ni efectos secundarios desagradables.
- Te ayuda a encontrar ese «equilibrio» cuando todo parece fuera de control.
En mi caso, los productos de Live Bio Hemp son los que uso porque me dan confianza y sé que son de calidad. Si estás buscando una herramienta extra para calmarte, definitivamente deberías probarlos.
Espero que estos consejos te sirvan tanto como a mí. ¡Tú puedes con esto! 😊
